miércoles, 8 de junio de 2016

Hasta pronto...


Ni la muerte sabe tan amarga 
al ver a un ser amado pasar por un impedimento
del cual nadie más que ellos pueden solventar 
porque se encuentran fuera de tu región,
y el desconsuelo es tan impactante... o infinito 
que ves como un león se come a su presa,
y tú, a lo lejos te quedas sin poder nada más que gotear 
las mejías para que el dolor no pase seco 
y así minimizar la congoja que suele pasear 
por los caminos nobles del corazón...
Si tan solo esta tierra de fuertes y de débiles
no fuera para ninguno de los dos, 
la subsistencia de tus amados, 
de aquellos expatriados, no por la patria,
sería un río vivo para los que sin voz se fueron...
a la fuerza, pero así lo hicieron. 
¡Cómo los extraña su terruño aun con esta deyección de catervas!
Amor lejano, sufro tanto por no poderte dar la mano
y mis sentimientos están congelados 
para guardar lo poco que queda de ti.
Tormenta y monzón 
que abate a la bomba escarlata de mi amor,
pronto, ¡Sí!, 
muy pronto buscaré como ver a los que se fueron 
para darles un abrazo de acá estoy yo,
guardando los perfumes de tus cabellos y la piedra negra junto a la flor
que me donaste antes de partir lejos...
y decirme adiós.
Alejandro Ayalá



No hay comentarios:

Publicar un comentario

8 consejos para ser escritor y vivir de escribir

 Ser escritor y vivir de escribir es un sueño para muchos. Todos los que amamos la escritura aspiramos a pagar nuestras facturas con nuestr...